el wawa de Troilo no quiere arrancar...
el bar que aun sigue viéndome pasar
conteniendo las lagrimas
reserva furiosa sostenida
por paredes de trigo y cristal
allí en la luz del caleidoscopio
inmóviles van rodando mis miedos perennes
al mundo desconocido
y sus orillas espeluznantes
guardando el almíbar
tu dolor desatado
enviando el mensaje encriptado
al bar
sus movimientos
y a la profunda tarde que se escapa